TENGO QUE CAMBIAR EL COLCHON.

A partir de mi reciente soltería y mis ganas de hacer cambio de vida y todos esos versos que una se propone cuando corta (en realidad la vida te da el cachetazo de Halls antes pero bue).

Me propuse lo siguiente:
1. Comprarme mucha ropa. Nunca fui fan y una amiga cuando me ayudó a ordenar mi placard me dijo que tenia que tirar la mitad. Lo cual era cierto. Sigo usando la remera que me compre el dia de mi graduacion de 5to año.
2. Ir al gimnasio. MMM voy 4 veces en 3 meses.. Fuck.
3. Salir con cuanto pibe se me cruce por el camino. (4 meses= 0 pibes)
4. No recurrir a los muertitos/ ex huesos. Voy 3.
5. Pegar un buen grupo de Soldados solteras para salir todas los fines de semana. (conseguí dos, pero las amo)
6. Volver al psicologo. Check.
7. CAMBIAR EL COLCHÓN

Creo que todo intento de vida nueva debería empezar por mi ultimo punto.
Mi tan querido colchón tiene 8 años. Me lo regalaron cuando me fui a vivir sola con mi primer concubino. El concubino duró menos que un paty pero el colchon y yo nos hicimos mejores amigos.
Compartimos todo. No solo las noches de notebook y 1/4 de helado mas sola que un hongo, sino las noches de llantos desconsolados por que fulano no me da bola, intoxicaciones, enfermedades, Pedos extratosféricos en los cuales, más de una vez tuve que dormir con el pie apoyado en el piso de lo que me daban vuelta las 4 paredes. Cuchareos. 2 ex novios. Y lo voy a decir. Sexo. Mucho Sexo. Hasta una amiga mía tuvo sexo en mi colchón. Oh si.. Era de esas amigas copadas que prestaban su hogar para que ellas pudieran hacer cunnilingus.
Creo que si mi colchón hablara me excomulgan de la iglesia apostólica. Por suerte no habla. En fin, como dije en el post anterior, no soy muy buena en las relaciones de pareja. Si en las otras. Asi que bastantes hombres conocieron a mi tan querido amigo: el colchón.
8 años mas tarde, con resortes vencidos y más maltratado que animal de circo, me propuse dejarlo ir, brindarle el descanso eterno, o peor, que encuentre en su proxima vida una peor que yo.

Pero, quien le quita lo bailado?